Traslado de oficinas!

Buenas tardes,

Os informo que gracias a la publicidad masiva de cenicienta hemos tenido una avalancha de cartoons con ganas de mejorar y hacer coaching, así que nos vimos obligados a trasladarnos a nuevas oficinas para responder a la demanda.

Os dejo la dirección:

http://factorp.es/blog-coaching-psicologia/

Gracias!!!

saludos

Blancanieves y el coaching

Suena el móvil, y veo una manzana… eing???

-“Hola Nadaia, soy Blancanieves”

-“la de los enanos?”

-“si.”

-“pensaba que me llamabas de Apple”

-“no, es que me encantan las manzanas, pero bueno, te llamo porque Peter Pan vino a la fiesta que organice para mis enanos y me comentó lo del coaching, me gustaría probar. Y lo quiero hacer contigo porque, ya sabes que me encanta la gente pequeñita!”

-“Te daré mi feedback a ese comentario luego, ahora no me apetece ser asertiva! Empezamos mañana?”

-“claro que si pequeña!”

-“uffff… se dice claro que si guapi, para no ser desagradable!”

Llegó por la mañana temprano, guapa como siempre, con su diadema y comiendo una manzana. Pensé, por eso es tan pálida, solo come manzanas. Sigo desconfiando que trabaja para Apple, es demasiada coincidencia la publicidad gratuita, creo…

Le pregunté, Blanca, trabajas para Apple? se puso roja, y me contestó, “que dices? Por qué dices eso? Por qué me haces esa pregunta? Qué tengo yo con Steve Jobs? Yo no tengo nada con él? Ni nos hemos visto nunca. También me gustan las fresas pero hoy he decidido comer manzana. Apple??? que dices yo no sé nada de eso, no tengo ni móvil...” percibí nerviosismo, y le dije: “tranquila Blanca, firmaremos el acuerdo marco con clausula de confidencialidad nada más empezar la sesión.” ufff como se puso la pava… Pa flipar...

Empezamos la sesión y Blancanieves me explicó su cuento, la bruja y su astucia porque sabia cuánto le gustaba las manzanas, el como hubiera sido más difícil lograr su objetivo si comiera todo tipo de fruta porque no sabría donde poner el veneno, su suerte en conocer a sus enanos y claro, la vida feliz con su príncipe. Después de ventilar Blancanieves define su reto: “quiero pensar y estar más por mi.”

Empezamos indagando:

-“en qué estás pensando cuando no estás pensando en ti?”

-“En los enanos, los quiero mucho, les estoy muy agradecida y me preocupo mucho por ellos, son siete y les tengo que ayudar en la casa para que se organicen y también hacerles las cosas de casa.”

-“te pre ocupas o te ocupas?”

- “Bueno, en realidad me ocupo de ellos para organizarles la vida por casa, son 7!”

- “Para qué lo haces?”

- “porque me necesitan! Son muy pequeños y no pueden con todo! Yo les facilito la vida ayudando, pero me quedo sin tiempo para mi y me gustaría pensar más en mi.”

- “imagina que dejan de necesitar tu ayuda en la casa y se apañan solos, como te sentirías”.

-”ufff… me sentiría un poco vacía y en deuda con ellos… les estoy muy agradecida y esta es mi forma de mostrarles mi gratitud...”

- “Como les podrías mostrar gratitud de otra forma?”

-” no lo se”

- “Especula Nieves!”

- “supongo que hablando con ellos, expresándoles todo mi aprecio y gratitud. Diciéndoles que gracias a ellos puedo comer manzanas sin miedo de morir y que estaré siempre disponible para ayudarlos porque los aprecio mucho. Explicándoles que me siento mejor durmiendo en casa con el príncipe en una cama con medidas normales porque las suyas son para enanos y duermo mal ahí. Creo que si les explico lo que siento me entenderán! La gente pequeña es muy comprensiva, no?”

Pensé...otra vez… no pierdas la racionalidad Nadaia, empatia, la quieres incondicionalmente, ella lo dice desde el cariño… la gente pequeña en cariñoso… me tomé un respiro, apague la radio mental y le pregunté: “te puedo dar mi feedback?” me contestó con un pronto: “si, claro pequeñita, dame tu feedback!”

Respiro hondo 4 veces y le digo: “ Nieves… tal como lo veo yo y esto es solamente mi perspectiva por si te sirve, los enanos no son gente pequeña, son personas normales con poca altura, tampoco son niños que necesitan que les cuiden, son adultos y eran suficientemente GRANDES y organizados para salvarte la vida, y hasta conocerte, su casa estaba perfectamente organizada. Yo confió que son autosuficientes y aparte, son 7, como has dicho, limpiar la casa entre 7 no lleva ni una hora supongo. Así que lo que yo percibo es que lo haces como forma de agradecimiento y creo que ahora has aprendido que existen otras formas de agradecer que te sirven más para que logres tu reto de estar más por ti. No creo que les debas nada, ni que ellos sean tu responsabilidad.” Me interrumpe, y dice: pero son pequeños, necesitan ayuda! Le digo: “Nieves! Estimada Nieves, te parece bien que trabajemos en otro momento esa creencia que tienes que la gente pequeña necesita ayuda y nos centremos en como vas a conseguir estar más por ti?” Me dice: si pequeñita, me parece genial!” sigo: “perfecto entonces, sigo con el feedback si te parece? Hay un concepto que creo que te puede servir para que te sientas mas tranquila a la hora de pensar en ti, es la distinción de responsabilidad 100%, organizar la vida de los enanos no es tu responsabilidad es suya, tu responsabilidad para que te sientas bien como dices es la de agradecerles por todo que hicieron y por estar presentes en tu vida, hasta ahí llega el 100% de tu responsabilidad. Por lo que me explicas estás viviendo con el 200% de la responsabilidad, crees que puedes devolverles el 100% que les toca y no cargarte con lo que no es responsabilidad tuya?” me dice: “creo que si, me sentía muy cargada con tanta responsabilidad, pero ahora veo que no quiero seguir así y me siento aliviada y serena porque no creo que sea mi responsabilidad todo. Ufff pequeña, muchas gracias, me siento mas aliviada.” Le pregunto, y que vas hacer ahora de diferente?” me contesta con firmeza: “ me voy a vivir con mi príncipe a tiempo completo porque es lo que quiero para mi. Me dedicaré más tiempo y creo que mis enanitos se alegraran mucho de verme feliz y liberada.”

Terminada la primera sesión, tenia la necesidad de hacer una llamada. Llamé a mi coach y le dije: “Me pasa algo con la declaración “gente pequeña”, necesito descubrir que me pasa a mi cada vez que la escucho! Tengo el impulso de defenderme y decirle : oye cara pálida, vete a tomar un poco de sol con tus manzanas a la playa que la gente pequeña no es invalida, solamente tiene menos altura y …. la necesitamos? NOOOO! Ufff” Mi coach con la serenidad que le caracteriza me contesta: “Nos vemos mañana para trabajar esa cantidad de creencias que acabas de declarar y que claramente crees que te están limitando, sino no me llamarías!” Ufff que asertividad el pavo! Impresionante.

Y así quedamos, hoy aprendí sobre mi con Blancanieves, aprendí que hay veces que tengo la necesidad de defenderme sin que realmente nadie me ataque y mucho más… Parece que tengo nuevo reto :)

Empece a seguir la Nieves en instagram! Sigo con la sospecha de que le pasa algo con Apple, es evidente…

Superman y el coaching

Esta semana me suena el móvil y veo Peter Pan, pienso, bueno, será una crisis infantil?

- ”Hola Nadaia, soy Superman!”
- “Él de los calzoncillos por fuera del traje?”
- “Bueno si… el que salva el mundo más bien. Estoy aquí con Peter que me ha animado con el tema del coaching y por eso te llamo. Estarías disponible un día de estos que no esté yo salvando el mundo?”
- “Claro que si guapi! Cuando crees que podrás? porque está el mundo que no veas...”
-”Ahora mismo, con las fiestas están todos comiendo y bebiendo, es el momento perfecto.”
- “Vale, nos vemos mañana entonces.”

Hemos quedado al día siguiente. Se presenta en el despacho con su traje típico y de pronto me dice: “Y esa cara? No te gustan los calzoncillos así?” le digo, “bueno...no  termina de convencerme tu buen gusto, pero es cosa mía, no le des importancia.”

Empezamos la sesión, Superman ha estado un buen rato ventilando, hablando de si mismo y de lo cansino que era el peso que carga para salvar el mundo todo el rato. Entonces definió como reto: “quiero dejar de usar mis habilidades superhumanas en beneficio de la humanidad y estar más por mi y por mi vida personal.”

“Como te sientes ahora mismo?”, le pregunté. Me dijo; “agotado” y empezó a llorar. Fue la primera vez en mi vida que he visto un super héroe llorando en calzoncillos. Empaticé con él, estaba sufriendo de verdad. Sin embargo no llegué a empatizar con el tema de los calzoncillos, me supera y para mi es ridículo, pero lo demás si. Quizás, pensé, me iría bien una sesión a mi para ver que me pasa a mi con la gente que lleva los calzoncillos por fuera, qué creencia limitante relacionada con eso tengo.

Le pregunté; “que quieres hacer Super?” Me contestó; “parar de salvar el mundo”, seguí, “para que lo haces?”, me contestó; “ya no sé porque lo hago” y le digo “ok. No pasa nada, yo tampoco te pregunté porqué, te pregunté para qué lo haces?”. Me miro fijamente y por un segundo pensé, acabo de incomodar al Superman, o me va a freir con sus poderes de visión calorífica o está reflexionando seriamente sobre la pregunta. Por suerte era solamente un cambio de observador, ufff.
Me contesta; “ lo hago para ser coherente con mi código moral de conducta ya que tengo que usar mis superpoderes de forma responsable, estoy obligado a hacerlo”. Me invade la curiosidad, y le pregunto, “ Obligado? Quién te está obligando?” otra vez me mira seriamente, y pienso, ahora si, me va a freír con los ojos. Y me contesta “nadie, soy yo mismo que me obligo a usar mi arsenal de superpoderes, podría no hacerlo creo, solo depende de mi entonces...” le regalo un largo silencio… y luego le pregunto, “que estás ganando con esa actitud?” Me contesta rápidamente, “Ego! Lo hago para sentirme importante e indispensable, me gusta sentir eso.”

Le digo “Te puedo dar mi feedback, super?” me dice “ claro que si, tu que piensas de todo esto que te conté?”
Lo solté...“ Lo que percibo yo cuando te escucho, es que estás comprometido con alimentar tu ego. Lo percibo en las expresiones que usas, “superpoderes”, en tus actitudes de “salvar el mundo”, en tu nombre “Superman” y hasta en tu forma de vestir, traje ajustadisimo a tu cuerpo trabajado y claro, los calzoncillos para dejar claro: soy diferente, yo las llevo por fuera! Aparte afirmas que estás salvando el mundo cada día, has visto las noticias? Te parece que el mundo está libre del mal? Parrr favarrr!
Bueno, se cree que las personas con mucho ego tienen un sentido exagerado de su propria importancia, se ubican por encima de los otros y se muestran vanidosas. Gracias al ego crees que percibes lo correcto, que estás en posesión de la verdad y que tu punto de vista es el correcto. Pues, como puedes ver, yo misma tengo otro punto de vista, diferente al tuyo, no será el correcto es solamente el mio, pero quizá te puede servir para reflexionar.
Aprovecho para hablarte de una distinción que creo que te puede ser útil, el egoless, que supone incorporar la idea de que nuestra percepción de la realidad no es la realidad. Supone centrarse más en el otro sin necesidad de intervenir, aceptando la idea de que tiene los recursos necesarios para encontrar su proprio camino. Que te parece esta distinción?”

Superman estaba apático, le regalé nuevamente un largo silencio… finalmente dice, “no me había visto nunca como me ves tu, pensé que todos me miraban como siendo el amo salvador del planeta. Quizá eso no sea la realidad y la salvación del mundo no depende solo de mi, no?” le contesto, “en mi opinión depende de todos, el mundo es de todos, responsabilidad de todos, y ya ves como está! Alguien no está haciendo su trabajo.” se ríe y dice, “cierto, esto no es mi trabajo!”

Por fin le pregunto, “con que te quieres comprometer? con estar más por tu vida personal sin cargar el peso de salvar el mundo? o seguir alimentando tu ego porque eso te hace sentir bien?” Me dice: “elijo comprometerme conmigo, mi vida personal es mi responsabilidad y solo depende de mi. Salvaré un par de gente porque eso también me gusta, pero en el caribe, porque ahora mismo me voy volando de vacaciones. Quiero dedicarme tiempo. Ahora creo que el mundo puede sobrevivir conmigo de vacaciones. Y sabes qué? Me quitaré este traje, estoy harto de ir siempre con lo mismo!”

Le digo, “déjame que te de un consejo, no como coach pero como persona que le gusta la moda, por favor, ponte los calzoncillos por dentro de la ropa...y la capa esta que llevas, dios mio, enfin, es una imitación clara de la caperucita roja, no te favorece!”

Y así terminamos la sesión.

El otro día leí un comentario suyo en facebook a un post que ponía, “Trump sigue siendo nuestro  presidente, Superman ayudanos!” su comentario fue: “no es mi problema, no soy ni americano con lo cual no le voté. Así que os pido que gestionéis las consecuencias de vuestras decisiones sólitos que yo tengo mi vida!” Y les dejó una foto, seguía con su traje, totarrrr.

Peter Pan y el coaching

Hace un par de días me suena el móvil y me dicen:

- “Hola Nadaia, soy Peter Pan.”

- “El niño que vuela?”

- “Si! He visto un tweet de Cenicienta sobre su experiencia alucinante con el coaching y me gustaría probarlo.”

- “Me parece genial Peter, cuando vuelves del país de nuncajamás?”

- “Iré volando ahora mismo.”

- “ok , pero cogete un avión vale?”

Y hemos quedado para nuestra primera sesión. Peter ha definido su reto: “estoy harto de ser un niño y quiero crecer!”

Hemos indagado sobre su concepto de madurar y crecer, sobre el para qué de seguir siendo un niño y que le aportaba esa actitud ahora mismo. Le regalé mi feedback y le dije: “ un niño es un ser humano con media docena de años, tu has nacido en 1904, tienes por lo tanto 112 años, me parece a mi que no eres un niño, sino que has elegido estar siendo un niño toda tu vida. Y si no eres así, sino que estás siendo, lo puedes cambiar y depende solamente de ti.”

Peter me contestó: “Bueno no lo había visto así, la verdad es que realmente no soy un niño, sino que me comporto como un niño”. Le pregunté para que le servia comportarse como un niño ahora mismo y me contestó: “para pasármelo bien con mi mejor amiga, campanilla, disfrutando como locos con los polvos y volando... crees que soy un adicto?” Le dije que lo importante es lo que cree él y que desde el coaching no trabajamos adicciones. Sin embargo, si su forma de disfrutar depende de los polvos para volar que quizá estaría bien consultar a mi compañera Mayte Cerón que es psicóloga sanitaria y lo podrá ayudar con este tema. Me siguió preguntando, “crees que soy enfermo?” sentí que le debía el feedback y le contesté: “Aquí entre nosotros Peter? Hay un síndrome con tu nombre...” y le regalé el silencio.

Seguimos con la pregunta, quieres seguir teniendo este comportamiento? Me contestó: No! Pero no se como decirlo a campanilla sin que le haga daño”. Entonces entrenamos la conversación para que Peter diga a su amiga como se siente.

Peter desarrolló el guión con lo que sentía: “Campanilla, sabes que te quiero y que eres mi mejor amiga, he estado reflexionando sobre mis actitudes y concluí que no quiero estar siendo un niño ahora mismo y elijo madurar. No quiero seguir consumiendo polvos para tener pensamientos felices ni seguir alucinando que vuelo si no tengo alas. Somos dos adictos guapa y lo sabes. Tu tienes alas y puedes volar entonces no necesitas los polvos y yo soy un hombre! Si quiero volar tendré que meterme en un avión. Somos adictos y lo sabes! Deseo seguir siendo tu amigo y salir juntos con los niños perdidos a tomar unos gin tonics, riendo y claro moviéndonos en metro o en taxi que te molará! Creo que lo podemos hacer juntos. Te quiero mi bichillo vicioso!!!

Al final de la sesión Peter se sentía sereno y con ganas de tener la conversación pendiente con su amiga. Declara que será el primeo paso de su transformación.

Me llamó el Jueves a las 3h de la noche, para decirme que estaba de fiesta con Campanilla y algunos de los niños perdidos, otros se habían perdido de verdad en el bar anterior. Me gritaba, estamos teniendo pensamientos felices y sin polvos, no estoy volando pero me siento flotandoooo.” Le dije, “Peter, eso es de los gin tonics que te has tomado”, en ese momento le pasa el móvil a campanilla que me dice, también gritando: “ Beber gin tonics es de guapassssss!!!!” le contesté, “claro que si guapi.” y colgamos.

He mirado su instagram y esta fue la foto de la noche…

cenicienta y el coaching

Era invierno cuando recibí la primera llamada de cenicienta. De inmediato le pregunté, “cenicienta la del zapato?” y me contestó, “si, la princesa”. Después de una breve conversación efusiva sobre zapatos, de los cuales las dos somos aficionadas, me contó que había escuchado dos empleados del palacio hablando de coaching y de como creían que les podía ayudar a lograr sus retos. Se interesó por el tema, y creyó que era el momento de desafiarse y por eso me llamó.

Hemos empezado el proceso de coaching, las dos con muchas ganas y muy ilusionadas de poder hacerlo juntas. Aparte del proceso, terminada cada sesión, íbamos las dos a dar un paseo por Barcelona de zapatería en zapatería, era nuestra conexión personal, nuestra visión compartida, nos entendíamos y disfrutamos como niñas.

Cenicienta se describía como una mujer soñadora sin embargo con falta de confianza en los demás y en si misma y con mucha dificultad en decir que no delante de una petición / orden.

Tenia ganas de cambiar, deseaba creer en si misma, ser una mujer con poder de toma de decisiones y sobretodo querría sentirse orgullosa de ella misma y de sus logros.

Juntas empezamos por trabajar la confianza analizando cada uno de sus pilares, la sinceridad, la competencia y la credibilidad. Cenicienta concluyo que en el día del baile cuando su marido, el príncipe, le pidió para bailar se había sentido especial y que mientras bailaban se dejó llevar y se sintió serena. Sin embargo al saber que eran casi las 24h y que en nada su príncipe la vería con los harapos del día a día, y con chanclas pensó...”dios mio!!!! por mucho que me diga que me quiera no creo que esté siendo sincero y que eso siga pasando si me ve así!!! con chanclas!!!! Horror! Soy fea...” Reconoce hoy que la creencia de que su belleza estaba en sus ropas y no en ella misma casi le costó su felicidad y la perdida de sus Jimmy Choo de cristal! Se estaba limitando… su creencia sobre si misma le hacia sentir miedo, había puesto en duda la sinceridad de su príncipe y por eso ha tenido la necesidad de huir / esconderse, no podía confiar en él porque la verdad es que era fea. Con la nueva perspectiva, cenicienta declara que no duda de la sinceridad de su príncipe y que cree que él la quiere realmente tal y como es ella ya que es verdad que la encontró, se casó con ella y que siguen juntos y felices hoy en día.

Reconoce igualmente que el plan de su marido de casarse con aquella que pudiera calzarse el zapato, le había dolido un poco con respecto a la credibilidad, dice “claro yo soy un 35, y la talla es poco común, pero en todo un reino habrá mas mujeres con esta talla y algunas de ellas tendrán buen gusto con lo cual el jimmy Choo podría haber servido a otra, entonces yo no estaba segura si creer que me querría a mi o si tenia un fetiche con pies pequeños!” Sin embargo, viendo que esta creencia no le sirve, cenicienta elije mirar el aquí y ahora, están juntos, se siente feliz y elije confiar totalmente en su príncipe. Se siente aliviada por haber sido capaz de cambiar estas creencias limitantes por creencias nuevas que la hacen sentir confianza y seguridad y le abren posibilidades de futuro. Declara sentirse confiada, mas creativa y expansiva y que sabe que eso le permitirá tener conversaciones internas (con ella misma) y externas (con otros) más generativas y transformadoras. Cenicienta había logrado su primer reto! Era hora de de ir a por unos Manolo Blahnik, se sentía atrevida y los merecía.

Seguimos con el proceso con vista a su segundo reto, aprender a decir que no! Comenta que desde siempre ha tenido esa dificultad. “yo era la que hacía los trabajos más duros de la casa, porque me mandaban y aún que no lo veía justo no era capaz de hablar...” refería cenicienta, “ no he sido capaz de hablar ni cuando mi madrastra dijo no irás al baile del príncipe, porque te quedarás aquí en casa fregando el suelo, limpiando el carbón y ceniza de la chimenea y preparando la cena para cuando nosotras volvamos. Esa noche lloré en mi habitación, estaba muy triste por no ir y por no haber sido capaz de exponer mi voluntad a mi madrastra”. 

A lo largo de las sesiones cenicienta ha concluido que  había sido educada para ser servicial y para hacer lo que los demás esperaban de ella, no es que no fuera capaz de decir que no, la capacidad la tenia, si no que el miedo de las consecuencias la habían paralizado. Se hizo así fan de la frase “ si tienes miedo hazlo con miedo”. Hoy se siente capaz de decir que no, de forma adecuada y sin dañar la relación, sabiendo que de ella depende el como lo dice y no el como el otro  lo escucha. Decide dejar de vivir en el resentimiento y tomar el mando de su voluntad.

Cenicienta comenta, que si fuera hoy, se ve perfectamente capaz de decir a su madrastra: “ Una vez que vivimos en familia y compartimos la casa, entre todas podemos limpiarla y adelantar la cena mas rápido y con menos carga para cada una de nosotras, para que luego, todas juntas, tengamos tiempo de ponernos a reventar de guapas y arrasar con el baile. Confío que me podrás entender cuando te explico que no dejaré escapar la oportunidad única de conocer al hombre de mi vida para quedarme a limpiar la casa cuando podemos entre todas perfectamente hacer las dos cosas. Deseo que no te tomes esto como una afronta, porque te quedará mala cara para ir al baile, de todas formas es solamente una recomendación, porque eso ya depende de ti y siempre puedes poner mas maquillaje.”

Y con este cambio de ser terminamos nuestro proceso de coaching. Nos fuimos a cenar las dos y lo pasamos genial! Hablando de zapatos y de como nos cuesta decidir entre unos louboutin y unos Jimmy Choo, Dios mio, es el drama!!! por eso compramos los dos. Hablamos de como a partir de ahora cambiará su vida en el palacio, Cenicienta se hartó de ser princesa y se ha nominado la reina de su vida, se siente libre, realizada y feliz! 

Nos hemos reído mucho al imaginar como hubiera sido el cuento después del coaching, ella misma decorando su carruaje, días antes buscando su vestido por Internet y claro está, la salida tan placentera en busca de los zapatos con parada en un starbucks y media docena de selfies!!! Disfrutando del baile como una loca, bailando Closer de Ne Yo con su príncipe, que le susurra: “te quiero cenicienta, eres especial” a lo cual contesta con un firme: “lo sé, gracias por tu feedback!